Panna Cotta según Wikipedia: "en italiano literalmente ‘nata cocida’ es un postre típico de la región italiana del Piamonte".
Bueno, pues desde hace unos cuantos meses es también el postre típico de mi casa. Cuando llega una fecha un poco especial, todos me piden que haga Panna Cotta; solo me libro cuando le toca elegir a mi hermano su postre, ahí sé seguro que es algo de chocolate blanco. Este fin de semana tocó fecha especial y el "santificado" me pidió Panna Cotta. Pero en mi casa no gusta como la tradicional, la prefieren menos consistente, no tan dura, así que me toca usar muchos vasos (y luego lavarlos)!!
Pero queda muy rica...riquísima dicen ellos. Es bastante fácil y rápida de hacer, además lleva pocos ingredientes.
Ingredientes:
· 1 l. nata
· 1/4 l. leche
· 200 g. azúcar
· 10 g. gelatina (yo uso en láminas)
· 1 bote de mermelada de cereza
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Preparación:
1. Poner la gelatina en un plato con agua.
2. Calentar la nata, la leche y el azúcar hasta que rompa a hervir.
3. Escurrir la gelatina y añadirla, sin parar de remover.
4. Colocamos en un recipiente para que se enfríe, durante 3 o 4 horas y, a continuación la llevamos al frigorífico.
5.
Servimos la gelatina en los vasos o recipientes individuales,
intercalando unas cucharadas de Panna Cotta con otras de mermelada.
Espero que os guste!
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* Si quieres que la Panna Cotta se parezca más a la original, el truco está en la gelatina, cuanta más gelatina añadas, más consistente quedará el postre; pero ¡ojo! no te pases o se quedará como una goma!
* También puedes no usar la leche y hacer la receta "original" italiana.
* Yo utilizo mermelada de cereza para decorar y para aportar un sabor al postre, pero se puede hacer de infinidad de sabores, tanto la base de la Panna Cotta como su acompañamiento.
